DOS MEDALLAS NOS DEJÓ HOY EL CANOTAJE: UN ORO Y UN BRONCE

DOS MEDALLAS NOS DEJÓ HOY EL CANOTAJE: UN ORO Y UN BRONCE Prensa COA

El K4 500 metros masculino (Juan Cáceres-Gonzalo Carreras-Ezequiel Di Giácomo-Manuel Lascano) ganó la medalla de oro, mientras que el K4 500 metros femenino (Sabrina Ameghino-María Garro-Micaela Maslein-Brenda Rojas) se llevaron la presea de bronce en la quinta jornada de los XVIII Juegos Panamericanos Lima 2019, en la pista de Lagoa.

 

 

Cáceres-Carreras-Di Giácomo-Lascano lograron imponerse en su especialidad, con un tiempo de 1 minuto, 22 segundos y 106 milésimas, tiempo suficiente como para subir al escalón más alto del podio. Los argentinos fueron escoltados por los botes de Cuba (Reinier Carrera-Renier Mora-Robert Benítez-Fidel Vargas), con 1:23:039, y México (Javier López-Mauricio Figueroa-Juan Rodríguez-Osbaldo Fuentes), con 1:23:106.

 

 

“Estamos muy felices, en mi caso por repetir. Este fue el primer paso, el objetivo a corto plazo que nos habíamos planteado. Ahora tenemos que seguir, nos vamos directo desde acá hacia una gira por Europa”, confesó Di Giácomo, de 27 años, que fue campeón en K2 220 metros junto a Rubén Voisard Rézola en Toronto 2015.

 

 

Lascano, el palista más joven del equipo con 24 años, destacó el trabajo en conjunto porque “salió todo como estaba planificado. Nos pusimos adelante rápidamente, que era la idea, pudimos mantener el ritmo y reflejamos todo el trabajo realizado”.

 

 

Carreras (29 años) comentó que “a mí me mandaron atrás en el bote para que empuje hasta el final, y por suerte las cosas nos salieron como queríamos. Lograr una medalla de oro en un Panamericano es algo que te llena de orgullo. Trabajamos mucho para esto y por suerte podemos ahora recoger los frutos de ese trabajo”.

 

 

Cáceres (27 años), quien tiene una historia muy particular ya que hace nueve años fue operado cuatro veces del corazón y en principio le habían sugerido que dejara el deporte de alto rendimiento, destacó que “desde el inicio de la regata, a los 100 metros, teníamos un bote de ventaja sobre nuestro competidor más cercano, entonces vimos que podíamos controlar el ritmo y ejecutar nuestro plan de carrera”. Sobre su tema coronario dijo: “Cuando pensé que no podría remar nunca más en mi vida el golpe fue inmediato y duro. Con el paso del tiempo, el hecho de recuperarme, entrenar nuevamente y competir fueron alivio y satisfacción a la vez. La situación fue horrible pero tuvo solución”.

 

 

Ameghino-Garro-Maslein-Rojas, en cambio, escalaron al tercer peldaño del premio con un tiempo de 1 minuto, 35 segundos y 606 milésimas. Delante de ellas se ubicaron las embarcaciones de Canadá (Andréanne Langlois-Alexa Irvin-Alanna Baylougheed-Anna Negulic), oro con 1:34:316, y México (Beatriz Briones-Karina Alanis-Brenda Gutiérrez-Maricela Montemayor), plata con 1:34:646.

 

 

En las pruebas clasificatorias, Sabrina Ameghino pasó a la final en K1 200 metros, al terminar segunda de la canadiense Andréanne Langlois (40:714), en su serie, con un registro de 40 segundos y 751 milésimas. Rubén Rézola ganó su serie también en K1 200 metros, con un tiempo de 35 segundos y 144 milésimas, y también obtuvo el pase directo a la final.