Luego de la gloria que alcanzó en Londres 2012, cuando conquistó la medalla de oro, Sebastián Crismanich se ubicó en la historia grande del olimpismo. Con una ajustada victoria ante el español Nicolás García Hemme por 1-0, en la categoría hasta 80kg, el  correntino consiguió la primera presea dorada para el taekwondo argentino (los registros anteriores eran los diplomas olímpicos de Gabriel Taraburelli, en Sídney 2002 y de Vanina Sánchez Verón, en Beijing 2008).

 

Sobre su hazaña, el taekwondista de 29 años recordó: “Son sensaciones desencontradas porque todas las emociones que han pasado a lo largo de mi carrera se encuentran en esa medalla olímpica. He pasado por momentos muy buenos y otros no tanto que formaron parte de la gran experiencia y de haberme llevado al rendimiento que pude tener en un Juego Olímpico. Engloba todo el esfuerzo que hizo mi equipo y yo, y toda mi familia, que fue mi pilar fundamental desde el comienzo, durante el proceso y aún lo sigue siendo. Un Juego Olímpico y una medalla abarcan tantos sentimientos que es inexplicable”.

 

Federico Molinari hizo historia al ser el primer gimnasta argentino en clasificar a una final olímpica en Londres 2012, en la que terminó con un diploma olímpico tras finalizar octavo en anillas, su especialidad.

 

Aunque el rosarino no podrá repetir su actuación en los Juegos Olímpicos Río 2016, está siguiendo bien de cerca a la delegación argentina. “Estoy contento con el rol que me toca ahora apoyando desde afuera. Si bien hice todo el intento para clasificar, una lesión me dejó fuera de los Juegos”, dijo Molinari, ganador de la medalla de plata en anillas en la Copa del Mundo que se llevó a cabo en mayo, en San Pablo, Brasil.